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El Papa con la Delegación Ecuménica de Finlandia El Papa con la Delegación Ecuménica de Finlandia  (Vatican Media)

El Papa: el mundo puede ser mentiroso, pero el camino ecuménico siga seguro

Al día siguiente del inicio de la Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, Francisco recibió a la delegación ecuménica de Finlandia: esta cita "no debe reducirse a un cumplimiento y no debe convertirse en autorreferencial".

Francesca Sabatinelli - Ciudad del Vaticano

El camino de los cristianos bautizados conduce siempre a Jesús. Al día siguiente del inicio de la Semana de oración por la unidad de los cristianos, Francisco recibió a la Delegación ecuménica de Finlandia, a la que señaló el testimonio de los santos que recorrieron el camino común hacia la meta.

"Como miembros de la comunidad de los bautizados, estamos en camino y nuestra meta común es Jesucristo. Y esta meta no está lejos, no es inalcanzable, porque el Señor ha salido a nuestro encuentro con su misericordia, se ha acercado en la Encarnación y se ha hecho a sí mismo Camino, para que podamos caminar con seguridad, en medio de las encrucijadas y las falsas indicaciones del mundo. Y el mundo es a menudo mentiroso".

El testimonio de los santos

A pesar de los tiempos en que "la veneración de los santos parecía dividir más que unir a los creyentes católicos y ortodoxos, por una parte, y a los creyentes evangélicos, por otra", señala Francisco, "esto no debería ser así y, de hecho, nunca ha sido así en la fe del santo pueblo fiel de Dios.

"Los santos son hermanos y hermanas que han recorrido este camino hasta el final y han llegado a la meta. Nos acompañan como testigos vivos de Cristo, nuestro Camino, Verdad y Vida. Nos animan a permanecer en el camino del discipulado, incluso cuando tenemos dificultades, cuando caemos. Como luces encendidas por Dios, brillan ante nosotros para que no perdamos de vista nuestra meta".

El camino juntos, un regalo para el ecumenismo

Francisco menciona "algunos grandes santos nórdicos", referencias importantes para los cristianos, como Brígida, Enrique y el rey Olav, cuyo milenario de su muerte se celebrará dentro de seis años: "Si el milenario de la muerte de San Olav en 2030 puede inspirar y profundizar nuestra oración por la unidad, y también nuestro caminar juntos, será un regalo para todo el movimiento ecuménico".

El significado de la Semana por la Unidad de los Cristianos

Para concluir, Francisco invitó a los presentes a recitar el Padre Nuestro cada uno en su propia lengua, expresando la esperanza de que la Semana de oración por la unidad de los cristianos no se vacíe de su significado.

"Hagamos que esta cita ecuménica no se reduzca a un cumplimiento y que no se vuelva autorreferencial: que tenga siempre la savia del Espíritu Santo y que esté abierta a acoger a los hermanos más pobres y olvidados, y también a los que se sienten abandonados por Dios, que han perdido el camino de la fe y de la esperanza".

Saludo del arzobispo evangélico-luterano

El saludo al Papa corrió a cargo del arzobispo de la Iglesia evangélico-luterana de Finlandia, quien agradeció al Pontífice la acogida de los peregrinos finlandeses, reunidos en una delegación ecuménica, compuesta no sólo por luteranos y católicos, sino también por representantes de la Iglesia ortodoxa. "Sus palabras -dijo- permanecerán en nuestros corazones y les darán calor, hoy y en los días venideros". A continuación, el arzobispo ofreció al Papa dos regalos en nombre de su Iglesia: "Un donativo a la organización Finn Church Aid", con el que "se podrán comprar cien mantas para niños de zonas difíciles", y luego "un par de guantes adornados con el emblema de San Olav, porque sus manos bendicientes devuelven el calor a este mundo helado que necesita sentir el amor, la paz y la redención de Dios".

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19 enero 2024, 11:00