Situación inaceptable en el Líbano, que se detenga la escalada
Salvatore Cernuzio – Ciudad del Vaticano
Una escalada «inaceptable», para el Papa Francisco, tiene lugar desde hace días en el Líbano, donde las oleadas de incursiones israelíes contra Hezbolá se han cobrado hasta ahora más de quinientas cincuenta víctimas civiles y niños.
Mientras se cuentan los muertos también en Beirut, suenan las sirenas en Tel Aviv y siguen lloviendo misiles libaneses al sur de Haifa y en otras zonas de Israel, llega el llamamiento del Santo Padre desde la Plaza de San Pedro, al final de la audiencia general.
Me entristecen las noticias procedentes del Líbano, donde los intensos bombardeos de los últimos días han causado mucha muerte y destrucción.
Detener esta terrible escalada
La esperanza del Papa Francisco es «que la comunidad internacional haga todo lo posible para detener esta terrible escalada».
«¡Es inaceptable!», reafirmó el Pontífice, reiterando su cercanía a una población que lleva ya años azotada por una crisis política, económica y social que parece sin solución y por las consecuencias de la dramática explosión en el puerto de Beirut en 2020.
Oraciones por los pueblos afectados por la guerra
Desde la Tierra de los Cedros, lo que Juan Pablo II llamaba «un mensaje», la mirada del Papa Francisco se desplazó también en esta 500ª audiencia general de su pontificado a los territorios y pueblos afectados por la brutalidad de los conflictos. Por ellos reza y pide oraciones el Obispo de Roma.
La tragedia del conflicto en Ucrania
Y de la martirizada Ucrania también se acordó el Papa en su saludo a los fieles polacos, cuando, recordando la «tragedia de la guerra» que aflige al país desde hace más de dos años, así como las inundaciones que han asolado Polonia, los exhortó a no dejarse «vencer por el egoísmo y la indiferencia».
El viaje a Luxemburgo y Bélgica
Un mensaje de esperanza será el que el Obispo de Roma lanzará desde el corazón de Europa desde mañana, 26 de septiembre, hasta el domingo 29, con su viaje a Luxemburgo y Bélgica.
Un viaje internacional, pocas semanas después de la larga peregrinación a Indonesia, Papúa Nueva Guinea, Timor Oriental y Singapur, para el que Francisco pidió el acompañamiento espiritual de los fieles.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí