México: arte sacro. “Maravilla americana: Miguel Cabrera”
Miguel Cabrera, el máximo artista plástico mexicano del sigo XVIII, fue autorizado a reproducir la imagen de Nuestra Señora de Guadalupe de manera idéntica, en afán de llevar la buena nueva más fiel del milagro al continente europeo, España y la Santa Sede.
Maestro de la expresión y la profundidad estética, Cabrera, nacido en la antigua ciudad de Antequera, hoy Oaxaca, logró crear un ambiente de solemnidad y espiritualidad en sus obras, así la Ascensión de la Virgen María en cortejo triunfal de ángeles, además de plasmar, en una singular alegoría de belleza y recogimiento, la ceremonia de la transubstanciación en que la hostia se convierte en el cuerpo de Cristo frente a la feligresía.
En el profuso legado del artista fallecido el 16 de marzo 1768 están pinturas de la Virgen Dolorosa, el Arcángel San Rafael, la Madre Santísima de la Luz y una escena idílica con la Virgen María y su hijo Jesús ofreciendo azucenas, símbolo de pureza, a San Luis de Gonzaga y San Estanislao de Kostka.