Purpurados de frontera para el diálogo y la misión
Andrea Tornielli - Ciudad del Vaticano
No se celebrará en noviembre, para la fiesta de Cristo Rey. El consistorio para la creación de los nuevos cardenales se adelanta al sábado 5 de octubre, la víspera de la celebración inaugural del Sínodo de Obispos dedicado a la Amazonía. Así , sorprendentemente, durante el Ángelus del domingo 1 de septiembre, el Papa anunció la lista de los 13 nuevos cardenales que recibirán el birrete rojo, ocho de los cuales pertenecen a órdenes religiosas misioneras.
Inmediatamente después de recorrer la lista de los nuevos cardenales (diez menores de ochenta años y, por tanto, electores en el caso de los cónclaves, más tres mayores de ochenta y, por tanto, no electores), se hace evidente la fidelidad al camino seguido por Francisco desde el comienzo de su pontificado: el de preferir hombres de la Iglesia en diócesis fronterizas, más allá de los esquemas y tradiciones establecidos.
Reciben el birrete púrpura que simboliza la voluntad de derramar la sangre y, por lo tanto, de dar su vida por la fidelidad al Evangelio en unidad con el Obispo de Roma, tres prelados de la Curia romana: El presidente del Pontificio Consejo para el Diálogo Interreligioso, Miguel Ángel Ayuso Guixot, un español comboniano, nombrado para dirigir el Dicasterio el pasado mes de mayo, en la vanguardia del diálogo con el Islam y otras religiones; José Tolentino Calaça de Mendonça, portugués, archivero y bibliotecario de la Santa Iglesia Romana desde hace poco más de un año; el padre Michael Czerny, jesuita nacido en Checoslovaquia, pero formado en Canadá y Estados Unidos, subsecretario de la Sección de Migrantes del Departamento para el Servicio del Desarrollo Humano Integral. De las nóminas curiales, esta última es sin duda la más innovadora. Czerny, además de su compromiso con los migrantes y refugiados, tendrá el papel clave de secretario especial en el próximo Sínodo para la región panamazónica.
De los diez nuevos cardenales electos, dos son obispos diocesanos en Europa: el luxemburgués Jean-Claude Höllerich, jesuita que pasó muchos años de su vida en Japón, y el italiano Matteo Zuppi. Dos son latinoamericanos: el cubano Juan de la Caridad García Rodríguez y el guatemalteco Álvaro Leonel Ramazzini Imeri. Dos son obispos en África: Fridolin Ambongo Besungu, capuchino, arzobispo de Kinshasa en la República Democrática del Congo, y el salesiano español Cristóbal López Romero, arzobispo de Rabat, Marruecos. Finalmente, uno tiene orígenes asiáticos: Ignatius Suharyo Hardjoatmodjo, Arzobispo de Yakarta, Indonesia.
Los tres mayores de ochenta años que el Papa Francisco quiso incluir en el Colegio Cardenalicio confirman también la perspectiva del pontificado: además del obispo inglés Michael Louis Fitzgerald, de los Padres Blancos, comprometido durante muchos años en el diálogo interreligioso y en los últimos años de su servicio en la nunciatura apostólica en Egipto, reciben también el birrete rojo Sigitas Tamkevičius, jesuita, arzobispo emérito de Kaunas en Lituania, y Eugenio Dal Corso, de los Pobres Siervos de la Divina Providencia, nacido en la provincia de Verona, Italia, obispo emérito de Benguela, Angola.
El del 5 de octubre de 2019 será el sexto consistorio para la creación de nuevos cardenales celebrado por Francisco. Los anteriores se realizaron el 22 de febrero de 2014, el 14 de febrero de 2015, el 19 de noviembre de 2016, el 28 de junio de 2017 y el 28 de junio de 2018.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí