Caritas Internacional: adoptar políticas climáticas a favor de los pobres
Francesca Sabatinelli - Ciudad del Vaticano
“Los gobiernos garanticen el cuidado del medio ambiente y la justicia social”. Esta es el enérgico llamado lanzado, a través de un comunicado de prensa, por Cáritas Internacional, con motivo de la COP26, que se está llevando a cabo en Escocia. Los 162 miembros de la Confederación de Cáritas, algunos de los cuales están presentes en Glasgow, reiteran su llamado, en línea con la Encíclica Laudato Si ', en favor de la justicia climática y políticas que protejan a los más vulnerables, especialmente a los migrantes.
El precio pagado por los más vulnerables
“Las tormentas devastadoras, la salinización del agua y el suelo debido al aumento del nivel del mar y las graves inundaciones – denuncia Aloysius John, secretario general de Caritas Internationalis - continúan afectando a numerosas comunidades. El cambio climático ya ha producido impactos irreparables en muchas partes del mundo donde la adaptación es el principal desafío para las poblaciones locales”. Estas comunidades, por tanto, aunque no son responsables de la crisis climática, "se ven obligadas a soportar las consecuencias en términos de pérdida de viviendas, medios de vida, habitad e infraestructuras".
La tragedia de la migración forzada
Las condiciones climáticas extremas están impulsando la migración forzada de más y más personas, lo que trae como consecuencia la pérdida de la identidad cultural y social de sus comunidades. “Sin embargo, hasta la fecha - añade John - no se garantiza el estatuto de refugiado ni ningún otro tipo de protección internacional a estas personas, que se ven privadas de derechos fundamentales como tener un medio ambiente limpio, saludable y sostenible en el cual vivir. Derechos fundamentales que los gobiernos estarían obligados a satisfacer mediante una acción política adecuada sobre el clima. Como afirma el Santo Padre en la encíclica Laudato si ', los países desarrollados del Norte global no pueden dejar de tener en cuenta su deuda ecológica con el Sur global”.
Actuar antes de que sea demasiado tarde
Caritas Internacional reitera que es responsabilidad de los Estados actuar con urgencia antes de que sea demasiado tarde. Aunque la pandemia de Covid-19 ha traído nuevas prioridades, afirma la nota, estas no deben usarse como una excusa para posponer decisiones y retrasar aún más la acción climática. Por el contrario, debe estimular el compromiso colectivo para adoptar un nuevo modelo de desarrollo basado en energías limpias y renovables, una economía más inclusiva y una mayor justicia, así como medidas concretas en términos de reducción de la pobreza y cancelación de la deuda. Como señaló el Papa Francisco en su reciente mensaje a la cadena BBC, la pandemia de COVID-19, como todo "momento de dificultad, también contiene oportunidades, que no se pueden desaprovechar".
Los países ricos son responsables ante los pobres
Existe una necesidad urgente de que los fondos para el clima lleguen a las comunidades locales para favorecer la adaptación y brindarles un mayor control sobre las prioridades y necesidades más inmediatas. En este momento crucial - continúa el comunicado de prensa - es de fundamental importancia que los Estados partes en las negociaciones climáticas de la ONU reconozcan sus obligaciones morales y legales hacia las comunidades más afectadas y las generaciones futuras. Caritas Internacional lanza un llamamiento al compromiso incondicional de los Estados más ricos para proteger a las poblaciones más pobres de los países en desarrollo, que se hacen vulnerables por el cambio climático, incluso si no son ellos los reponsables.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí