Confirmada la condena de los ex administradores del IOR
Vatican News
El Tribunal de Apelación ha reconocido plenamente los argumentos del IOR y ha condenado al ex director general Paolo Cipriani y al director adjunto Massimo Tulli a indemnizarle con unos 40 millones de euros. Así lo anunció el propio Instituto en un comunicado.
La sentencia, depositada el 18 de enero, desestima íntegramente las pretensiones de los dos exdirectivos, confirmando lo resuelto en primera instancia contra ellos, y les condena a indemnizar al Instituto por los daños y perjuicios causados, que se han liquidado en 35.740.587 euros en concepto de daño emergente, y 4.799.445 euros por lucro cesante (lo que supone un total de 40.540.032 euros, más la devaluación de la moneda y los intereses legales). El Tribunal de Justicia ha impuesto las costas del procedimiento a los apelantes, incluidas las correspondientes a la primera instancia.
La sentencia -señala el comunicado del IOR- se refiere a "la mala gestio" con la que Cipriani y Tulli concertaron algunas de las inversiones del Instituto entre 2010 y 2013, y que "inmediatamente resultaron perjudiciales por ser problemáticas y, en varios casos, también ilegítimas y objeto de procedimientos penales".
"El juicio -continúa el comunicado- es la continuación de un profundo trabajo de renovación y transformación del Instituto en aplicación de las importantes reformas del sector financiero del Vaticano y de la Santa Sede, gracias a las cuales el Instituto ha podido identificar los abusos cometidos contra él y defender su patrimonio, que es además patrimonio de la Iglesia. Fue el primero de este tipo en el Estado de la Ciudad del Vaticano, que sirvió de precursor de otros casos similares, que todavía están en curso".
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí