Nuevos testigos en el Juicio Vaticano

Barbara Castelli - Ciudad del Vaticano

Cuatro nuevos testigos y una orden. Este fue el contenido de la trigésima tercera audiencia del juicio sobre las inversiones financieras de la Secretaría de Estado en Londres. La audiencia de hoy, que ha durado unas cuatro horas, incluida una larga pausa para la reunión del Consejo, se ha desarrollado de la forma que ha pedido recientemente el presidente del Tribunal del Estado de la Ciudad del Vaticano, Giuseppe Pignatone, con preguntas dirigidas a "rebatir un hecho concreto", sin "hacer repetir a los testigos lo que ya consta". En la sala multifuncional de los Museos Vaticanos, los acusados fueron el cardenal Angelo Becciu y Fabrizio Tirabassi.

El “custodio de las medallas”

El primero en dar testimonio fue Fulvio Cesaretti, de la Oficina Administrativa de la Secretaría de Estado. El hombre, definido en los papeles preliminares por un testigo como el "custodio de las medallas", confirmó por primera vez las declaraciones hechas a la Oficina del Promotor de Justicia el 13 de febrero de 2020. A continuación, a preguntas del abogado Massimo Bassi, en defensa de Fabrizio Tirabassi, aclaró que la Oficina del Óbolo era distinta de las demás, con varios empleados y "coordinada por monseñor Alberto Perlasca". Las medallas o monedas", informó Fulvio Cesaretti, "se guardaban normalmente en un almacén de la oficina administrativa. Las medallas de oro, en cambio, se guardaban en la habitación de Monseñor Perlasca, en un armario cerrado". En el transcurso del interrogatorio, salió a relucir que el testigo nunca había "presentado ninguna queja sobre la falta de monedas o medallas", aunque, de hecho, no había "un inventario real". Por último, Cesaretti habló de la llamada práctica del "squaglio", es decir, las medallas sobrantes, "especialmente las de oro", "se utilizaban para hacer otras medallas o anillos" y se enviaban a la Casa de la Moneda del Estado italiano o a empresas externas, a veces sin "documentación adjunta".

Excepción de la Defensa de las “preguntas perjudiciales”

El asesor financiero Michele Mifsud validó su testimonio del 12 de abril de 2021, aunque quiso aclarar que había conocido a Dario Micheli (socio fundador de Valori Asset Management, y colaborador en la creación de la División de Banca Privada de Azimut) en Roma, en el restaurante Le Vele, y no en Milán, como se recordó erróneamente al principio. La reunión había sido organizada por Fabrizio Tirabassi, a quien conoció - se empeñó en señalar - a través de su párroco. Las preguntas del abogado Calipari, para el demandante civil Ior (Instituto para las Obras de Religión), en el contexto de la relación entre el testigo y Fabrizio Tirabassi, provocaron la reacción del abogado Luigi Panella, en defensa de Enrico Crassus. 'Hoy está surgiendo de forma plástica que se han hecho muchas preguntas perjudiciales en las investigaciones', dijo, 'por lo que tenemos que plantear una cuestión de nulidad en una orden general'. El problema, según él, a raíz de los artículos 193, 245 y 246 del Código de Procedimiento Penal del Estado de la Ciudad del Vaticano, sería el sistema de "adr" (pregunta-respuesta) de las transcripciones en las actas, en las que no se informa de las preguntas, hasta el punto de que se podría hipotetizar una violación de la "sinceridad de la respuesta". El presidente del Tribunal, Giuseppe Pignatone, al leer el acta, rechazó las excepciones, precisando -entre otras cosas- que la "capacidad fisiológica de las defensas" para desarrollar sus actividades está garantizada en el juicio.

El Óbolo de San Pedro y la Fundación Enasarco

Fabrizio Giachetta, empleado de la Secretaría de Estado, que ya había sido escuchado por el Cuerpo de Gendarmería el 4 de febrero de 2020, denunció que las "competencias financieras" de la oficina fueron modificadas tras la llegada del cardenal Angelo Becciu como sustituto de la Sección de Asuntos Generales de la Secretaría de Estado, dejando todo en manos del jefe de la oficina, monseñor Alberto Peralsca, y de Fabrizio Tirabassi. Entre los interrogantes seguía estando el Óbolo de San Pedro, utilizado, según se informó, "para cubrir las pérdidas presupuestarias". Autorizado por sus superiores, Giachetta dijo que "el Óbolo se utilizó para cubrirse, pero no eran figuras extraordinarias". Carlo Bravi, antiguo director general de Enasarco, habló en cambio de los fondos Athena. El fondo de pensiones complementario obligatorio para los profesionales de la intermediación comercial y financiera, se señaló, en línea con lo ya declarado el 11 de enero de 2021, quiso salir de la inversión debido a la "criticidad de los gestores".

Próximas audiencias y nuevos testigos

Este 28 de octubre se escuchará, entre otros, a Federico Antellini Russo, subdirector de la Autoridad de Información Financiera. Además, el presidente del Tribunal informó de que el cardenal Oscar Cantoni, obispo de Como (Italia), acudirá al tribunal el 1 de diciembre para declarar sobre la acusación de soborno de testigos contra el cardenal Angelo Becciu, contra Peralsca.