Estudio 9. Mónica Santamarina: Mujeres de la UMOFC, constructoras de paz
Renato Martinez – Ciudad del Vaticano
Del 14 al 20 de mayo, se realizó en la ciudad italiana de Asís, la Asamblea General de las mujeres de la Unión Mundial de las Organizaciones Femeninas Católicas (UMOFC), centrado en el tema: “Mujeres de la UMOFC, artesanas de la fraternidad humana para la paz en el mundo”. El evento congregó a más de 832 representantes, de 67 organizaciones diversas, de 32 países provenientes de todo el mundo, con el objetivo de afrontar los desafíos globales y analizar el rol fundamental de las mujeres en la promoción de la paz.
Mónica Santamarina: trabajar por las mujeres, en especial por las más vulnerables
Al final de la Asamblea General se eligió a la Presidenta de la UMOFC, que representará a esta Organización por los próximos cuatro años. Las representantes eligieron a la mexicana Mónica Santamarina, ya tesorera general de la UMOFC. En Vatican News dialogamos con la neo-Presidenta, madre de cuatro hijos y abuela de 8 nietos, dedicada a la educación y la enseñanza desde muy joven, miembro de la acción católica desde adolescente y comprometida en la promoción de la mujer en diferentes ámbitos.
“Empecé en la Acción Católica, luego fui presidente de toda la Acción Católica y después me dirigí hacia la parte de mujeres. Siempre he trabajado por las mujeres, también en alguna instancia del Gobierno, en el Instituto Nacional de las Mujeres en México. Toda mi vida he tenido la inquietud de trabajar por las mujeres y en especial por las más vulnerables. Conocí a la UMOFC hace muchos años, estuve como vicepresidenta regional, vicepresidenta América Latina y El Caribe, vicepresidenta general; luego, me retiré unos años, regresé como tesorera y bueno, ahora, la Asamblea me tuvo la confianza de elegirme como presidente”.
Los frutos de la Asamblea de la UMOFC
Mónica Santamarina refiriéndose a los frutos de la Asamblea General de la UMOFC que se tuvo en el mes de mayo dijo que, el encuentro con el Papa Francisco en la audiencia previa al inicio de la Asamblea fue el impulso que guio todo el encuentro. “El Papa nos invitó – precisa la Presidente – a vivir en plenitud nuestro ser mujer”.
“La audiencia con el Santo Padre fue para nosotras realmente una motivación, una guía. Nos invitó a seguir trabajando con el Observatorio, a seguir el diálogo, a seguir creciendo, a ser valientes, como siempre invita a las mujeres. Al día siguiente iniciamos nuestra Asamblea en Asís. El primer fruto fue la asistencia, fueron cerca de 850 mujeres de 67 organizaciones, de 38 países, fue un gran fruto, nunca habíamos tenido una Asamblea tan grande y esto es muy rico, porque el intercambio de experiencias, el poder vivir juntas, reflexionar juntas, orar juntas, nos ayuda a crecer. Se habló mucho de la sinodalidad, en dónde estamos muy metidas en ese proceso. También se habló de la participación de las mujeres en la Iglesia, en la sociedad, en el mundo. Después, trabajamos sobre cuáles van a ser nuestras grandes líneas de trabajo para los siguientes cuatro años”.
Impulsar el Observatorio mundial de las mujeres
Otro de los aspectos que la Presidente de la UMOFC resaltó fue el trabajo que viene realizando el Observatorio Mundial de las mujeres, iniciativa que fue lanzada en junio del año pasado con el fin de hacer visibles a las mujeres invisibles de los cinco continentes.
“Primero, ya se consolida el Observatorio y es un proyecto ya definitivo de la UMOFC, ahora tenemos que impulsarlo y hacerlo crecer. Ahora, tenemos un segundo proyecto sobre las mujeres y la sinodalidad que va a hacer una continuación del primero, en él vamos a dar a conocer los resultados de nuestro primer proyecto. Tenemos previsto algunos webinars en los distintos idiomas, tanto para difundir resultados como para escuchar a las nuevas participantes, a algunas mujeres que participan y que hayan sido invitadas a participar en la fase universal. Y en África, pues el proyecto está a la mitad, tenemos una encuesta en el que fueron más de 10,000 mujeres, queremos empezar a ayudar a formar a las mujeres africanas en las grandes necesidades que vimos, como violencia, como la gran soledad que se vive en los matrimonios forzados, etcétera. Se va a hacer un webinar en Tanzania para formar tanto mujeres laicas, como religiosas. Queremos formar una red grande entre mujeres, laicas y religiosas y crear los instrumentos necesarios para que puedan trabajar contra estas cosas sobre violencia y discriminación”.
La prioridad de construir un futuro con los migrantes
Mónica Santamarina también destacó que una de las prioridades de la UMOFC para los próximos cuatro años es acoger la invitación del Papa Francisco de construir un futuro junto con los migrantes y refugiados.
“Es una de nuestras prioridades, precisamente ante la urgencia que hay. Primero, vamos a crear instrumentos que puedan ayudar a nuestras mujeres en los distintos países, en las distintas organizaciones, según sus posibilidades, sus circunstancias, para que cada una de ellas pueda ayudar en este camino de acoger a los migrantes, de darles una oportunidad, de darles una oportunidad de una nueva vida, ayudar a proteger sus derechos humanos, y lo hacemos, sobre todo, en las comunidades que tenemos cercanas a las fronteras, en los países donde están viviendo este flagelo de la humanidad. Entonces, vamos a hacerlo es una inquietud que permeó totalmente la Asamblea. Lo vamos a hacer también a nivel internacional, nosotros tenemos presencia en el Consejo de Derechos Humanos, vamos a hacer presentaciones y también lo vamos a hacer a través del Observatorio, porque el Observatorio ha visto mucho esta realidad de los migrantes”.
La profesionalización de las mujeres
Finalmente, Mónica Santamarina señaló que otra de las prioridades de la UMOFC para los próximos cuatro años es la profesionalización de las mujeres, para que así ellas puedan crearse un futuro diferente, incidiendo, sobre todo, en la formación de las mujeres jóvenes de todos los continentes.
“Es otra de nuestras grandes prioridades para estos próximos cuatro años, la formación de las mujeres, de todas las mujeres, especialmente de los más jóvenes. Porque nos tenemos que preparar, estamos pidiendo mucha más participación en la sociedad y en la Iglesia, pero la mujer está consciente de que no ha tenido las mismas oportunidades de formarse, ni en la sociedad ni la Iglesia de nivel teológico y eso te lo dicen mujeres religiosas y laicas. Las mujeres tenemos que trabajar, tenemos que capacitarnos más para poder estar y tenemos que ser valientes, pero prepararnos para ello y en este sentido la UMOFC tiene que cambiar, tiene que hacerse atractiva para los jóvenes, darles una oportunidad a las jóvenes, escuchar sus necesidades y según eso dar una respuesta. Por eso, tenemos que cambiar de imagen, tenemos que cambiar formas de comunicar, y buscar que sea un momento de diálogo intergeneracional en donde podamos apoyarlas”.
Gracias por haber leído este artículo. Si desea mantenerse actualizado, suscríbase al boletín pulsando aquí