Krajewski en Ucrania: Dolor por el ataque al depósito de Cáritas
Benedetta Capelli - Ciudad del Vaticano
"Siento dolor". Hay una profunda tristeza en las palabras del cardenal Konrad Krajewski, Limosnero del Papa contactado por teléfono en Ucrania, donde debe llevar la ayuda y el consuelo de Francisco. Se refiere al atentado que tuvo lugar en la noche del martes 19 de septiembre contra un depósito de Caritas-Spes Ucrania situado en Lviv. Un depósito utilizado a menudo por el Dicasterio para el Servicio de la Caridad para llevar materiales donados por el Papa a personas necesitadas. Aquí, por ejemplo, se enviaron generadores eléctricos, que luego se distribuyeron en las zonas más aisladas a causa del conflicto. Cáritas informa que el depósito y todo lo que contenía fue arrasado, cerca de 300 toneladas de ayuda humanitaria se convirtieron en humo, afortunadamente no hubo víctimas en el ataque.
Una nueva misión
El cardenal Krajewski se encuentra en la zona de Lviv porque, además de llevar ayuda, tiene previsto inaugurar una casa para mujeres y niños, "Casa del Riparo", construida gracias al apoyo del Papa y de muchos donantes y que será gestionada por las hermanas Albertinas. "Esta casa -informa un comunicado del Dicasterio para el Servicio de la Caridad- fue construida durante el conflicto para apoyar a las numerosas personas que huyeron de los lugares bombardeados" y que, al no querer abandonar el país, buscaron refugio en Lviv. "Las madres solas con sus hijos y las mujeres sin hogar encontrarán allí hospitalidad en habitaciones adecuadamente preparadas. También se ha previsto un comedor para los pobres dentro de estas instalaciones, con el fin de proporcionarles una comida caliente y un lugar de acogida", prosigue el texto. "El Limosnero inaugurará la casa en nombre del Papa Francisco, como signo de apoyo, ayuda y cercanía a las numerosas personas que se han visto obligadas a huir a causa del conflicto, llevando la Bendición Apostólica". Krajewski también tiene previsto visitar las distintas comunidades que acogen a los refugiados y dar las gracias "a todos los voluntarios y a todos aquellos que ayudan a la población sufriente y necesitada, lejos de sus hogares".
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