Laudate Deum. La voz de científicos y activistas se une al grito del Papa
Antonella Palermo - Ciudad del Vaticano
Armonía entre el contexto y las palabras. Es lo que se ha vivido esta mañana, 5 de octubre, en el espléndido marco de los Jardines Vaticanos, en el Largo della Radio, donde se ha presentado a la prensa la Exhortación Apostólica Laudate Deum, publicada ayer. Unánime por parte de los académicos, estudiosos, activistas, representantes de la sociedad civil y del mundo de la cultura invitados, fue el consenso sobre un documento que, integrando la Encíclica Laudato si' de hace ocho años, espolea a instituciones y naciones a un compromiso urgente para afrontar las consecuencias del cambio climático global.
Premio Nobel Parisi: es difícil una humanidad solidaria con las guerras
La Exhortación Apostólica está escrita de forma sencilla y llana y se dirige a todos. Y esto es una virtud. Así lo expresó en la apertura de la presentación el Premio Nobel de Física, el profesor Giorgio Parisi, quien expresó su aprecio por un documento que considera "necesario". Convencido, como el Pontífice, de que son los más débiles los que sufren mucho más que los demás los efectos del cambio climático, el académico se congratula de cómo el Papa subraya la urgencia de una implicación global y de proceder de forma equitativa y solidaria: "Bloquear con éxito el fenómeno requiere un esfuerzo monstruoso por parte de todos", afirma Parisi. Insiste en la importancia de una "transferencia masiva de recursos de los países más avanzados a los menos ricos". En este sentido, pone a África como ejemplo: "No podemos esperar que las poblaciones africanas dispongan de recursos para construir paneles fotovoltaicos.
Necesitamos un plan mundial para poder llevar fuentes de energía renovables a esas regiones". Además, insiste en la necesidad de mejorar la educación, especialmente la de las mujeres, en estas latitudes. Así se crea conciencia de que la protección del medio ambiente es una cuestión colectiva indispensable. En cuanto al "punto de ruptura" al que, según el Papa, nos acercamos inexorablemente, el profesor señala el "conflicto armado con Rusia, y el económico con China". El concepto que subraya el Nobel es que "una humanidad solidaria es difícil si hay guerras". Y así lo precisa también en la entrevista concedida a Vatican News:
"La Cop28 en Dubai es extremadamente importante. Lo que ha subrayado el Papa Francisco es hacer acuerdos verificables y verificados. 'La esperanza nunca muere, claro que veo una situación extremadamente difícil', dice el físico. 'Tenemos una guerra con Rusia y una guerra comercial con China que no apuntan a nada bueno en términos de solidaridad internacional'. También añade su preocupación por la tecnocracia: "Significa pensar que es sólo un problema técnico de tomar decisiones, pero es un problema político. Los técnicos están al servicio de la política, no pueden sustituirla".
Petrini: La gestión internacional ha sido ineficaz hasta ahora
Vandana Shiva, científica y activista medioambiental, está conectada a distancia y se une al coro de voces que apoyan el documento del Papa: entre otras cosas, espera que se pueda reabsorber un tercio de las emisiones y acabar con la extinción de animales. Su agradecimiento al Papa Francisco por esta Exhortación es explícito: "Debemos trabajar para preservar la Tierra. Las soluciones están ante nuestros ojos. Sanar el suelo es la mejor economía". El gastrónomo Carlo Petrini, también desde la distancia, alaba que el texto haga hincapié en el dramatismo del momento histórico que atravesamos. Y añade que en los ocho años transcurridos desde Laudato si', "la sensibilidad política internacional y la gobernanza se han mostrado totalmente ineficaces e ineficientes y han creado las condiciones para que una parte significativa del sistema medioambiental esté ahora irreversiblemente comprometida. Hasta el punto de que muchas actividades virtuosas que el Papa Francisco espera y que pueden llevarse a cabo tendrán como efecto contener el desastre anunciado y no resolverlo". Petrini destaca la condena del negacionismo que "está creando una barrera frente al cambio". La posición del Papa, comenta el inventor de Slow Food, es clara y reclama una acción decidida. El otro elemento que, según él, es significativo en el texto del Papa es que revela hasta qué punto el Pontífice es plenamente consciente de la entrada en escena de un nuevo sujeto: las asociaciones y los movimientos, incluso radicales, y la sociedad civil. Sin estas energías "desde abajo", concluye Petrini, no tendremos éxito. "Nadie puede permanecer indiferente, todos deben convertirse en sujetos activos".
Foer: ¿tenemos la voluntad de creer a los científicos?
El discurso del escritor Jonathan Safran Foer destaca la "sabiduría y valentía" del Papa. Contando un episodio de la tragedia del holocausto, explica cómo desgraciadamente los cerebros humanos son buenos calculando la trayectoria de un huracán, mientras que les cuesta ser empáticos. Es precisamente el tema de los negacionistas del cambio climático en el que le gusta ahondar: aunque hay señales evidentes, seguimos sin sentirnos implicados. Parecen cosas abstractas, aisladas. No son una narrativa que nos concierna". ¿Tenemos la voluntad de creer lo que nos dicen los científicos?" es la pregunta que se hace Foer. "¿Estamos dispuestos a hacer pequeños sacrificios por el futuro?". Llega a decir que incluso cuando ponemos una inscripción en una camiseta o participamos en una manifestación, aun así podemos permanecer en un plano de abstracción. Necesitamos una revolución también en el ámbito político", dice, "y necesitamos esperanza". Y, como judío, cita a San Francisco: cuando estemos muertos no nos llevaremos nada con nosotros, sólo lo que hemos dado.
Jóvenes activistas: Pedimos protección contra los negacionistas
Los discursos de los activistas Luisa-Marie Neubauer, líder de Viernes por el Futuro en Alemania, y Benoit Halgand, cofundador de las organizaciones juveniles francesas Por un Despertar Ecológico y Lutte et Contemplation, son una sacudida al compromiso de todos. Decepcionada por lo que ahora llama "un cuento de hadas" (el cuento que escuchó desde pequeña en su familia y en su lugar de origen, Hamburgo, de que el crecimiento de la economía beneficiaría a todos), cuenta la experiencia de un movimiento que ha ido sumando a miles de personas. Menciona la historia de un camarada que fue detenido en Vietnam la semana pasada por intentar concienciar sobre la necesidad de llevar a su país por el camino de la sostenibilidad. Le preocupa lo que percibe como "una crisis de confianza en nosotros. Necesitamos que la Iglesia hable". La Laudate Deum habla también de una crisis de una cultura". Luisa-Marie aboga por la protección, a toda costa, y se dirige a los cristianos: "Esto del Papa es una llamada para que la Iglesia se convierta en una verdadera aliada, debe perseverar en su desinversión en combustibles fósiles". Por su parte, el joven católico francés profundiza en el carácter espiritual de la causa, al igual que hace el Papa en la parte final de la Exhortación. Halgand menciona también sus esfuerzos para contrarrestar los proyectos de explotación en Tanzania y otras regiones africanas por parte de Total, que, según él, engañan a las poblaciones locales. Advierte sobre la idolatría del mercado que "nos aleja de Dios". Afirma que "el mal contra el que luchamos no está fuera de nosotros, fuera de nuestras Iglesias, está en nosotros". Nos invita a detenernos, a cultivar nuestra relación con Dios. Anunciar y vivir el Evangelio, observa, exige hoy una respuesta encarnada, anclada en Cristo, junto a la gente, de forma comunitaria, con alegría.
Ali, de Libia: un ciclón destruyó Derna, defiende la Casa Común
El testimonio en perfecto italiano de Jubran Ali Mohammed Ali, joven inmigrante de Libia, arranca aplausos. Con veintiocho años, llegó a Italia en 2020. En Trípoli estudiaba economía, cuando empezó la guerra en 2011 dejó de estudiar y empezó a trabajar como albañil. En Italia sigue estudiando como mediador cultural. Habla del ciclón Daniel que destruyó la ciudad de Derna. Esto ocurrió no solo por el cambio climático, "sino también porque se construyeron casas bajo la presa y nunca hubo control ni mantenimiento", dice. Su agradecimiento al Papa es por el afecto expresado a los emigrantes y su deseo: "Espero que mi país cambie porque sé que mucha gente del oeste, incluso mis parientes, han ido a ayudar a la gente del este y así el país se ha unido, dejando atrás las divisiones y el dolor del pasado. También espero que toda la gente aprenda a respetar la naturaleza y a defender nuestra casa común, la Tierra. Espero que mi país cambie. Entonces el país estará unido, dejando atrás las penas del pasado.
¿Quién pagará por la belleza perdida?
Alessandra Sarmentino, del Proyecto Policoro de la Archidiócesis de Palermo, animadora del Movimiento Laudato si' y asociada de Azione Cattolica, nos lleva a Sicilia, donde la negligencia, la inercia y la malicia infligieron el verano pasado un duro golpe a las maravillas paisajísticas y arquitectónicas de la zona invadida por las llamas. Habla con amargura de los daños sufridos por toda una región "atrapada en sí misma". Denuncia que "el problema más triste es la costumbre. Nos hemos acostumbrado al escenario de la muerte y sólo nos preocupamos cuando está a nuestras puertas'. También insta a una ciudadanía activa. Y concluye con una pregunta: ¿estamos haciendo realmente todo lo posible? ¿Quién pagará por la belleza perdida?
La ronda de testimonios terminó con una intervención en vídeo del fotógrafo Arthus-Bertrand Yann, especializado en documentales televisivos de temática medioambiental y autor de una versión de Laudato si' con sus impactantes y evocadoras fotos. "Soy un simple testigo de la belleza del mundo, no la fabrico, está delante de mí", afirma, revelando cómo la vida debe protegerse simplemente porque es bella. "Una belleza que trasciende la realidad", afirma. Recuerda algunos datos, como el hecho, por ejemplo, de que el 80% de los insectos ya no existen en los campos europeos, "un fenómeno que pasa desapercibido pero que son la base de la vida". Y recuerda los 27 millones de personas obligadas a abandonar sus países también por el cambio climático. Los emigrantes la mayoría de las veces tienen un gran coraje, argumenta, tienen cosas que decir y que enseñarnos, no pueden ser el chivo expiatorio. Anuncia su próxima película "Migrantes", cuyo mensaje es: realmente tenemos el poder de actuar. Y concluye: la conversión ecológica no vendrá del mundo económico-político, la conversión será espiritual.
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