Iglesia en salida para afrontar crisis en la transmisión de la fe

Patricia Ynestroza - Ciudad del Vaticano

Entre los distintos temas abordados en el sínodo sobre la sinodalidad, ha sido el papel de los laicos, de las mujeres y de la familia para caminar sinodalmente con la Iglesia en misión. En entrevista al cardenal Carlos Aguiar Retes, primado de México, confirmó que en particular las mujeres, son quienes más apoyan en el trabajo pastoral de las diócesis.

Una fractura en la transmisión de la fe

El purpurado afirmó que en el sínodo se ha hablado de la crisis que está viviendo la Institución familiar en el mundo, ya desde el 2012, cuando participó en el sínodo sobre la Nueva Evangelización que presidió el Papa Benedicto XVI, se había reconocido que estaba fracturada la transmisión de la fe en las familias, y esto se ha sumado a la fractura también de la transmisión de la fe, en lo social -dijo el purpurado- esto se aprecia sobre todo en los países católicos, que se ha roto el consenso de los valores que antes, era lo que determinaba la conducta social, y esos valores eran en favor de la familia, de la buena vecindad, de las relaciones entre unos y otros, señaló.

"Hay que trabajar en los ambientes laborales, los de relación comercial, y hacernos presentes en ellos, esta es la lglesia en salida, y misionera para llevar el mensaje cristiano, creo que de esta manera se puede afrontar este desafío".

Afrontar el tema de la violencia contra las mujeres

Se abordó también en el sínodo la violencia que sufren las mujeres, las religiosas. Al respecto, el purpurado dijo que hay que tomar conciencia de que existe esta situación y no tratar de disfrazarla, negándola, tratando la situación como un caso aislado, el problema es que existe en todo el continente una polarización y según Aguiar esa polarización hace que el hábito de confrontación sea cotidiano, al respecto, la Iglesia ofrece un mensaje de reconciliación, que permita que las ideologías no sean motivo de confrontación, se puede pensar diferente, en relación solidaria y subsidiaria. Y esto afirmó, por último, debe existir en las comunidades, en la familia, para poder afrontar el problema.