Llamada telefónica Zelensky-Parolin: deseos de curación al Papa
Salvatore Cernuzio - Ciudad del Vaticano
Deseos de pronta recuperación al Papa, gratitud por el apoyo "moral" al pueblo ucraniano y agradecimiento también por los esfuerzos para facilitar el regreso de los niños ucranianos "ilegalmente deportados y desplazados por Rusia". Estos son los temas que el Presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky, ha tratado con el Cardenal Secretario de Estado, Pietro Parolin, en una llamada telefónica mantenida hoy, viernes 14 de marzo de 2025, que se produce pocos días después de que Kyi y Washington llegaran a un acuerdo durante las conversaciones en Yedda para un alto el fuego de 30 días.
La conversación
Fue el propio Zelensky quien dio noticia de la conversación con Parolin -a quien había conocido el pasado mes de julio durante el viaje del cardenal a Ucrania- a través de un post en su cuenta de la red social X. La conversación fue confirmada también por el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, durante el briefing diario con los periodistas.
En el post de Zelensky se lee: "He hablado con el Secretario de Estado de la Santa Sede, el cardenal Pietro Parolin. Le deseé al Papa Francisco una pronta recuperación y le agradecí sus oraciones y su apoyo moral a nuestro pueblo, así como sus esfuerzos para facilitar el regreso de los niños ucranianos deportados ilegalmente y desplazados de Rusia". "La Santa Sede ha recibido una lista de ucranianos detenidos en cárceles y campos rusos. Contamos con el apoyo para su liberación", añadió el presidente, subrayando que el intercambio de prisioneros y un alto el fuego de 30 días serían "los primeros pasos rápidos" para acercarse a “una paz justa y duradera”. "Ucrania está dispuesta a dar estos pasos porque el pueblo ucraniano desea la paz más que nadie", afirma Zelensky. "La voz de la Santa Sede es muy importante en el camino hacia la paz".
Trabajo en favor de menores y prisioneros
No es la primera vez que el dirigente de Kyiv agradece públicamente a la Santa Sede su labor en favor de la liberación de los más de 19.000 menores ucranianos llevados a la fuerza a Rusia y del intercambio de prisioneros. Él mismo había sido el primero en recurrir a la red diplomática vaticana pidiendo su intervención en estas cuestiones. También lo había hecho en su primera audiencia de posguerra con el Papa Francisco, en 2023, así como en la última reunión -la tercera en el Vaticano, la cuarta considerando la bilateral en el G7 de Apulia-, el 11 de octubre de 2024.
La misión de Zuppi
También en 2024 y de nuevo a través de X, Zelensky había expresado su gratitud a la Santa Sede por "los esfuerzos" realizados "para traer a casa" a los dos religiosos redentoristas, Ivan Levytskyi y Bohdan Heleta, detenidos en noviembre de 2022 y liberados por Rusia en un intercambio de prisioneros con Ucrania el 29 de junio del año pasado. El Jefe del Estado también se mostró satisfecho de la misión del cardenal Matteo Maria Zuppi, destinada a "aliviar las tensiones en el conflicto de Ucrania", que había hecho escala no sólo en Kyiv, sino también en Moscú, Washington y Pekín, reuniéndose con representantes políticos y eclesiásticos. Fue precisamente la misión de Zuppi -como también confirmó el cardenal Parolin en varias ocasiones- la que puso en marcha "un mecanismo" para el intercambio de prisioneros y la repatriación de niños.
Así lo confirmó también el arzobispo Paul Richard Gallagher, secretario de la Santa Sede para las Relaciones con los Estados y las Organizaciones Internacionales, durante su intervención en la Conferencia sobre la Fórmula de Paz en Montreal, propuesta por el propio Zelensky (octubre de 2024). El tema del orden del día era la "Propuesta número 4" de los diez puntos que componen la Fórmula: la "liberación de todos los prisioneros y deportados". Esta ayuda humanitaria fue entonces "el objetivo principal de la misión del cardenal Zuppi a Kyiv y Moscú", aseguró Gallagher. Esta misión, añadió, "condujo a la creación de un marco para la repatriación de niños y al intercambio regular de información entre ambas partes. También incluyó reuniones en línea con la participación de los nuncios apostólicos en los dos países", Visvaldas Kulbokas en Ucrania y Giovanni d'Aniello en Rusia.
"La presencia de los dos nuncios apostólicos es útil para facilitar el diálogo", explicó el prelado. Kulbokas en particular, informó además, "ha identificado instituciones católicas dispuestas a acoger a familias con menores repatriados". Y ello mientras la Santa Sede ha reiterado "sus peticiones de nuevas listas de niños", ha remitido "miles de nombres de prisioneros, pidiendo su intercambio y liberación" y "ha solicitado a la parte rusa el traslado de soldados ucranianos fallecidos".
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