Tabernáculos del Señor

“Anunciar a Cristo significa mostrar que creer en Él y seguirlo no es sólo algo verdadero y justo, sino también es algo bello, hermoso. Corazón del evangelio es la belleza del amor salvífico de Dios manifestado en Jesucristo muerto y resucitado". Inspirándose en estas palabras del Papa Francisco, para vivir la Cuaresma y la Pascua, continúa la colaboración entre Vatican News y la Biblioteca Apostólica Vaticana.

Paolo Ondarza – Ciudad del Vaticano

Esta representación de la Última Cena está tomada de un manuscrito, conservado en la Biblioteca Apostólica Vaticana, copiado en escritura humanística por al menos tres manos diferentes.

Misal - Biblioteca Vaticana, Arch. Cap. S. Pietro I.16 - Roma, ca. 1535-1536 (mm 410x285; ff. 147) (© Biblioteca Apostolica Vaticana)

El miniaturista de los manuscritos de la Sixtina

La imagen, insertada en un marco situado en el margen superior de la hoja, se encuentra dentro de un refinado frontispicio arquitectónico, decorado en estilo antiguo, en colores pastel y embellecido con gemas y camafeos.

Un detalle de la decoración (© Biblioteca Apostolica Vaticana)

El autor de la ilustración ha sido reconocido como el famoso artista francés Vincent Raymond, clérigo de la diócesis de Lodève en Languedoc y activo en Roma entre 1535 y 1547. Durante este periodo, bajo el pontificado de Pablo III, fue el miniaturista oficial de los manuscritos de la Capilla Sixtina.

Un detalle de la decoración (© Biblioteca Apostolica Vaticana)

La visita de Carlos V a Roma

En el margen inferior se reconoce el escudo del papa Alessandro Farnesio, junto con los del obispo Bernardino della Croce y los emblemas heráldicos del emperador Carlos V de Habsburgo. Estos elementos han llevado a suponer que el misal se realizó con motivo de la visita de Carlos V a Roma para la Pascua de 1536.

“El Señor que quiere permanecer con nosotros en la Eucaristía. Y nosotros nos convertimos siempre en sagrarios del Señor; llevamos al Señor con nosotros, hasta el punto de que Él mismo nos dice que si no comemos su cuerpo y bebemos su sangre, no entraremos en el Reino de los Cielos. Este es el misterio del pan y del vino, del Señor con nosotros, en nosotros, dentro de nosotros”

(Papa Francisco - Santa Misa in Coena Domini el 9 de abril de 2020)

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