Guatemala. Iglesia llama al diálogo y la paz tras violentos disturbios

Ciudad del Vaticano

El Congreso dio marcha atrás, ayer, lunes,  en su proyecto de Presupuesto de ingresos y egresos del Estado 2021 rechazado por todos los sectores sociales y causa de las protestas que se desataron el pasado 19 de noviembre, primero en las redes sociales y luego en las calles, donde aún continúan. Criticado por sumar endeudamiento y por haber sido aprobado de forma opaca por el Congreso, cientos de manifestantes tomaron el pasado sábado la sede parlamentaria y le prendieron fuego a varias oficinas hasta ser desalojados por fuerzas de seguridad. Ahora piden la renuncia de la Junta Directiva del Congreso y la salida del Presidente Alejandro Gianmattei, por avalar la decisión.

Obispos: Presupuesto de la nación desorbitante e irresponsable

Los Conferencia Episcopal de Guatemala (CEG), apenas conocida la noticia sobre el nuevo Presupuesto 2021, emitió un Comunicado en el que critica al Congreso por la “manera precipitada”  e “irresponsable” en que fue aprobado y que ha generado “indignación” en los distintos sectores del país, especialmente, por “el modo opaco y seguramente turbio” de las votaciones parlamentarias para alcanzar una mayoría calificada.

“Llevamos diez años consecutivos de aprobación de presupuestos desfinanciados pero nunca antes en los montos tan desproporcionados como el correspondiente a este año. El endeudamiento del país – afirman los Obispos – está llegando a niveles francamente preocupantes y las deudas de hoy son hambre para el mañana”.

Un llamado al discernimiento y búsqueda del bien común

El Episcopado juzga de “miopía ética” la eliminación y disminución de presupuestos en sectores importantes como el sistema sanitario, educativo y de derechos humanos.  De allí su petición al Presidente Gianmattei a vetar dicho presupuesto que ha generado la desconfianza en el Congreso por parte de la población y que no  favorece la gobernabilidad del país, y por el contrario, daña la paz social. Con un llamado al discernimiento y la búsqueda del bien común, concluye el Comunicado de la CEG, que piden la protección y la guía del Señor en "estos tiempos de calamidad y adversidad".

Monseñor Gonzalo de Villa: Es importante promover el diálogo

Por su parte, el Arzobispo de la Arquidiócesis de Santiago de Guatemala, Monseñor Gonzalo de Villa y Vásquez SJ, luego que la manifestación pacífica a la que se había convocado a los ciudadanos guatemaltecos se tornara violenta, señaló, “Es de lamentarse ciertamente que llegaran bochincheros, extremistas que al final terminaron arruinando algo que era cívico”. También condenó el utilizar la violencia para hablar en nombre del pueblo. Asimismo, mostró su descontento con la mala utilización de las fuerzas de seguridad quienes por tratar de mermar la situación aumentaron el nivel de tensión entre la población manifestante al agredirlos físicamente.

“Es importante promover el diálogo – señaló el Arzobispo – es importante promover la defensa del sentido de autoridad en el país, es importantes también saber que no se puede actuar impunemente, es importante saber que la manifestación cívica es un derecho y un derecho que la gran mayoría de los participantes querían expresar y lo hicieron públicamente y fueron unos pocos los que estuvieron provocando los disturbios”.

Protestas contra el presupuesto del Estado para el año 2021

Guatemala vivió una de las jornadas más violentas de los últimos años el pasado sábado 21 de noviembre cuando varios manifestantes incendiaron y vandalizaron el Congreso de la República y otros edificios públicos en el centro de la ciudad de Guatemala, incluida la Catedral Metropolitana. Esto como forma de rechazo a la aprobación del presupuesto de ingresos y egresos del estado para el año 2021, aprobado el pasado miércoles 18 de noviembre en horas de la madrugada. Dicho presupuesto “reduce las partidas para salud y protección social, destinando menos recursos para la prevención de la desnutrición, la atención materno-infantil y el tratamiento del cáncer, entre otros rubros”. En el año 2015 tras varias manifestaciones pacíficas el pueblo de Guatemala logro la renuncia del entonces Presidente Otto Pérez Molina y su Vicepresidente, luego de ser señalados de actos de corrupción.