Violencia en Myanmar: Cuatro niños muertos y muchos heridos
Vatican News
En una declaración de Debora Comini, directora regional para Asia Oriental y el Pacífico de UNICEF, se refiere a los niños que perdieron la vida y a los muchos otros heridos de la semana pasada por la violencia reinante en el país.
El pasado 8 de enero se encontró el cadáver de un niño de 13 años en Matupi, en el estado de Chin, mientras que una niña de 12 años y otro niño de 16 resultaron heridos con armas pesadas en Loikaw, en el estado de Kayah, tras intensos ataques aéreos y de mortero.
Ese mismo día, una niña de 7 años resultó herida por un fuerte tiroteo en Hpa An, en el estado de Kayin.
Condena de los ataques aéreos y armamento pesado en zonas civiles
En cambio, el 7 de enero, un joven de 14 años y dos de 17 murieron por disparos en el municipio de Dawei, en la región de Tanintharyi. Además, el 5 de enero, dos niñas de 1 y 4 años de edad resultaron heridas por fuego de artillería en Namkham, en el estado de Shan.
UNICEF está profundamente preocupada por la escalada del conflicto en Myanmar y condena el uso de ataques aéreos y armamento pesado en zonas civiles. Estamos especialmente indignados por los ataques a niños que se han producido durante esta escalada de los combates en todo el país.
Condolencias a las familias de las víctimas
Así lo exigen el derecho internacional humanitario y la Convención sobre los Derechos del Niño, de la que Myanmar es signatario. Además, y al igual que con otros incidentes recientes, UNICEF pide que se tomen medidas urgentes para garantizar la realización de investigaciones independientes sobre estos incidentes, de modo que los responsables puedan rendir cuentas. La organización extiende asimismo “sus más profundas condolencias a las familias de las víctimas".
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